Desayunos, comidas y cenas de negocios sirven para cerrar tratos importantes, asegúrate de saber las reglas que te harán un gran negociador y cerrador
El momento es clásico: tienes una comida de negocios con un cliente, no sabes a qué restaurante invitarlo, qué comida le gusta, cómo tratarlo y lo que es más, llegado el momento hasta te tomas quince minutos para llegar tarde. Las comidas de negocios no son sólo el pretexto para ver al cliente cuando algún asunto nos urge, es toda una ceremonia en la que lo atiendes, proteges y sorprendes, asegurando un trato o preferencia de su parte.
“Una comida de negocios es perfecta para que tu cliente se sienta consentido y atendido. Es importante tomar en cuenta que una comida de negocios exitosa puede ser la diferencia entre tú y la competencia (…) Cuando estás preparado, cuando te tomaste la molestia para saber los gustos de tu cliente, él se da cuenta de ello”, comenta David Navarro, consultor en Imagen Pública y director de Imagen Excellence.
Para que esto suceda, lo primero que debes saber es que existe un protocolo a seguir, reglas qué aprender y una apariencia que debes cuidar. Para ello, David Navarro nos brinda, paso a paso, las reglas de etiqueta que debes seguir para que tu comida de negocios sea todo un éxito.
Qué y de cuánto es la reunión
Lo primero que debes tomar en cuenta es el objetivo de la reunión, de esta forma sabrás cuánto tiempo se debe dedicar a la negociación y si conviene invitarlo a un desayuno, una comida o una cena. Por ejemplo: si la negociación no tardará más de 30 minutos, un desayuno es perfecto para ello, sin embargo, cuando se habla de presentar un proyecto especifico o cerrar algún negocio, lo mejor es que se invite a una comida o cena, de esta forma el tiempo es más amplio.Otro factor que debes tomar en cuenta es la magnitud de tu negocio. Tienes que considerar que la cita va acorde el dinero que se está jugando sobre la mesa, asegura el experto, de esta forma sabes cuánto puedes invertir. Recuerda que debes de cuidar cada inversión que se hace con cada uno de tus clientes, no puedes gastar lo mismo en una comida donde se cerrará la compra de dos o tres equipos computacionales a una comida donde se hablará de los próximos tres o cuatro meses de ingresos.
La inversión a realizar en las comidas de negocio se limita de acuerdo con el negocio a tratar.
Para organizar la reunión
Antes de invitar a tu cliente debes tomar en cuenta los siguientes factores: comida, lugar y distancia. Para ello, el experto en Imagen Pública asegura que necesitas hacer una investigación previa para saber qué tipo de comida le gusta a tu cliente, de esta forma, no sólo evitarás tener problemas al pedir, sino sorprenderás a tu cliente con un agasajo culinario de su gusto.Cuida que el lugar de la reunión ya sea conocido por tu parte, esto ayudará a que los servicios sean mejores, pues así tendrás la confianza de hablar con el encargado para que te atienda lo mejor posible antes de que empiece la reunión.
Sabemos que el tráfico de la ciudad dificulta cualquier reunión que organices, sin embargo, cuando se trata de sorprender a tu cliente, el protocolo dice que el lugar de reunión tendrá que quedar cerca del espacio físico de trabajo del mismo, evita escoger lugares en puntos medios o que queden cerca de tu oficina, esto habla mal de ti y de tu imagen como empresa.
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